Saturday, February 14, 2009

Pequeña cárcel

En esto de no quererse uno mismo, se puede descubrir algún día que sólo por tener unos (en este caso MUCHOS) kilos de más, se ha dejado de lado todo tipo de intercambio social.
Puede sonar extraño, hasta rayando la ridiculez, pero cuando a uno lo hacen crecer con un complejo fuerte sobre la imágen externa, es difícil sacudirse el estigma y salir adelante airoso. Ya hace 10 años que empecé mi encierro. No necesito paredes, tampoco rejas fuertes..con mi mente basta y sobra.
En todo esto debo reconocerme el mérito de la apariencia...a pesar de todo, gracias a mi estoica y brillante sonrisa, nadie se imagina los demonios que cargo por dentro, la cantidad de voces que me gritan a la vez y no descansan. Por fuera parezco en paz...aunque las voces siguen gritando. Son voces que no se callan, no suenan de a una, se superponen. A veces no entiendo, me aturden y me generan uno de esos ataques de ansiedad que me llevan a liberar presión como una olla en plena cocción. Se me quema la cabeza. Lloro. No lo controlo. Se me ocurren millones de cosas. Todas negativas. Todas son NO. Si no me hablan ni me preguntan qué me pasa, me calmo en un rato. Si me ven y percibo preocupación, me siento una molestia.
Me he estado cansando de mi misma en estos días y, aunque trato de relajarme, no puedo...me supera. Intento dejar a los que me rodean que hagan lo que quieran y no estar constantemente enojada. No digo nada, no reclamo, no reto, no peleo, no argumento...me limito a sufrir de impotencia...exactamente lo que no debiera hacer.
Mi cuerpo ES mi herramienta de trabajo, pero me resulta más sencillo cuidar la camioneta que a mi misma. Entonces empiezo mi monólogo interior. No me merezco nada, soy poco, nada de lo que hago, es suficiente. Pero también me asalta la dualidad y me pregunto: "Por qué no me permito disfrutar aunque sea de a ratos de lo bueno que me pasa?"
Todo es negativo, todo es deprimente. Hasta estas palabras son de terror. Quiero ver los colores brillantes, dejar de concentrarme en lo oscuro, saber que no me tengo que preocupar por cosas tonta. No cosigo REALMENTE dejar de hacerlo.
Hace 10 años más o menos dejé de frecuentar a mis amigos y amigas de la infancia porque me daba vergüenza que me vean gorda. Desde entonces no logro conservar a largo plazo, a ningún amigo nuevo de los millones que tuve en mi camino. Por lo tanto...no me los merezco. "Los amigos son como plantas que necesitan de cuidado" y yo estoy provocando que todos se sequen.
"No te tenés que encerrar en vos, ni limitarte a tu familia", he escuchado repetir al menos un par de veces a mi psiquiatra en consulta. Y es en esas ráfagas de lucidez que me doy cuenta que no tengo a nadie fuera de mi marido, mis padres y hermanos...los descuidé a todos los demás...sólo por no sentirme bien conmigo misma y para evitar dejar de lado a los que si están...sólo porque no me puedo sacar de la cabeza que la imágen lo es todo y yo, sencillamente, no merezco nada.

Wednesday, October 08, 2008

Wednesday, August 20, 2008

De ansiedades y demás yerbas

Acabo de visitar nuevamente el blog de una hermana del corazón, y me encontré leyendo una descripción medio fumada pero SUPER artística de la ansiedad que padecemos aquellos que la incorporamos como un "desorden".
Y hablando de ansiedades...ayer tuve visita al ginecólogo que atiende mi embarazo y a pesar de que le pedí que no me dé la fecha de parto aún, el MUY insensato de mi esposo se la preguntó en mi presencia...rayos!!! Yo que estaba cuidando mi umbral de desesperación!...falta un mes y 20 días que se pueden convertir en menos si mi organismo lo decide así. Para colmo de males...mi shrink se toma vacaciones durante toooodo Septiembre.
Entonces yo me pregunto: Y ahora qué hago????
Vuelve a atacarme la sensación de que nadie me entiende, solo mi sister que está a muchos kilómetros de distancia y mucho no puede hacer. Mi esposo me mira como si estuviera loca, mi madre me repite incansables veces que no me haga problema y mi cuñada semi-nueva me quiere llevar a una endocrinóloga!
No quiero tomar medicamentos! Ni del psiquiatra ni de una "yuyera". Lo que más quiero en este momento es que dejen de presionarme en la escuela con la insensata pregunta de "¿Cuándo tomás la licencia?" Si tienen tanto interés por saber ¿Cómo es que no se pudieron grabar el 19 de Septiembre de las millones de veces que contesté lo mismo?
Por desgracia, en términos generales, la gente no entiende a los que tienen "trastornos de ansiedad", nos ven como a locos, desequilibrados y hasta peligrosos. No entienden que el único inconveniente radica en la imposibilidad de manejar esa ansiedad, en la necesitad de no esperar, de que TODO (lo importante y lo no tanto) se resuelva YA.
Entiendan de una vez por todas que no estoy loca, solo un poquito apurada. Tengo paciencia de sobra para enseñarles a mis alumnos y tratarlos mejor que el resto (yo los trato como "adolescentes/personas" los otros profesores en general, sólo como "alumnos"), pero no llego ni al 1% de paciencia a la hora de esperar.
Resumiendo y para dejarlo más claro, me puedo colgar del dicho "El que espera, desespera"...
Si para cualquiera esto es común, para mi lo es aún más.